No tenía empacho en proclamarse como futuro unicornio nacional. Por atreverse, se atrevía hasta a desafiar a Google, Amazon, Microsoft o Dropbox porque Hello, primero, y hello.app, después, iba a convertirse en el ‘no va más’ en términos de almacenamiento de datos distribuido en la nube.
El ambicioso proyecto lo explicaba Álvaro Pintado Santaularia, su impulsor, así: “En poco tiempo, ordenadores como nuestros teléfonos, iPads y portátiles podrán reemplazar a las grandes granjas de servidores centralizadas, lo que significa que los que posean esas granjas cada vez serán más prescindibles y, por otro lado, el que haya construido esa primera red de computación y almacenamiento basada en los dispositivos que tenemos en nuestras manos será imparable”, y eso es lo que iba a ser su empresa.
Claro que para cambiar el mundo hace falta también dinero y en su búsqueda parece que se centró el CEO más que en el desarrollo de la nueva infraestructura.
La empresa la funda en 2022 a la edad de 18 años junto con Alexander Baikalov, otro joven de 20 años de origen ruso desvinculado del proyecto desde el pasado mes de octubre. Con un perfil tecnológico, Pintado le conoció a través de un tablón de anuncios de servicios profesionales y le atrajo con la tentadora invitación de formar parte de un proyecto con potencial de convertirse en el próximo unicornio español. Poco después, pondría fecha a la épica: “en los próximos 3 años”.
No tenían aún Producto Mínimo Viable (MVP) cuando el joven CEO contaba ya con los servicios de una agencia de comunicación para difundir el proyecto. Aquí fueron a parar, supuestamente, parte de los 170.000 euros que había conseguido levantar en una ronda preseed con inversores, según se informó entonces, como Esade BAN, CastiVentures o Bcombinator, de cuyo programa de aceleración formaba parte. La ronda de 170.000 euros habría sido completada con un Enisa de 130.000 euros.
De Hello a hello.app
Cuando hablamos con Pintado la primera vez, en junio de 2023, la empresa se llamaba Hello. La siguiente ocasión fue en octubre de ese mismo año, cuando Pintado contactó con nosotros para anunciar el cambio de nombre de la startup y la compra del dominio: “Ahora, en lugar de llamarnos Hello nos llamamos hello.app, todo en minúsculas y todo junto y, como dato interesante que a lo mejor puedes mencionar, hemos comprado el dominio y tenemos la compra más cara en la historia de España de un dominio por 107.000 euros, que justamente es el dominio hello.app”.
La compra del dominio, según se informó posteriormente, habría aumentado notablemente la visibilidad de la app, con “un crecimiento del 2.500%” de personas interesadas por la aplicación «en tan solo 3 meses”. En ese momento, se aseguraba que la plataforma contaba ya con 100.000 usuarios.
La siguiente información que recibimos de hello.app data de enero de 2024 anunciando la apertura de otra ronda semilla por valor de 2 millones de euros. No debió de ir muy bien cuando, dos meses después, en marzo de 2024, volvieron a remitir una nota de prensa anunciando ahora un crowdfunding para recaudar 300.000€, “con posibilidad de ampliación en base a la demanda” y complementar así la ronda de financiación de 2 millones de euros.
El crowdfunding se abrió el 20 de marzo en la plataforma Seedrs –ahora Republic Europe–, afirmando que, en las 3 primeras horas de apertura, ya habían recaudado 120.000 euros. Pero lo cierto es que ni de los 2 millones ni del crowdfunding se supo más, acabando la aventura inversora con otro comunicado, este de julio de 2024, hablando del levantamiento de 500.000 euros en una ronda apoyada por inversores privados como Gerald Heydenreich (fundador de Ethermail), David Holtmann o Albert Bonet. La compañía situaba entonces su valoración en 16 millones de euros.
Presunta estafa
El objetivo que se habían fijado alcanzar en 2025 era de 3 millones de usuarios. Pero ahora parece que toca rebajar las expectativas después de que, según otros medios de comunicación, el joven emprendedor barcelonés haya sido denunciado por uno de los inversores de presunto delito de estafa.
Al objeto de recabar su parecer sobre el asunto, hemos intentando contactar con Álvaro Pintado quien, al contrario de su proceder anterior, mantiene el teléfono “apagado o fuera de cobertura”.
Seguiremos contando esta historia, independientemente de hacia dónde gire: si continua el proyecto adelante o la demanda por presunta estafa sigue avanzando.