El comienzo del año nuevo es una buena oportunidad para proponerse nuevos objetivos. También para las empresas.
Por eso, podemos aprovechar este momento para reflexionar y establecer nuevas metas, como fomentar una cultura del éxito y generar un entorno laboral en el que los empleados puedan alcanzar sus propósitos personales y profesionales.
Y para eso, el papel de los managers es crucial, apoyando a sus equipos a establecer propósitos como mejorar sus habilidades, adquirir nuevas competencias o encontrar un mejor equilibrio entre la vida profesional y la personal.
“Este enfoque no sólo refuerza la confianza del equipo, sino que contribuye directamente a su bienestar general y beneficia directamente a las empresas, ya que cuando los empleados están satisfechos y motivados tienden a ser más productivos y estar más comprometidos con su trabajo”, explica Cigna Healthcare.
5 palancas para promover la cultura del éxito
“Fomentar propósitos personales y profesionales para el nuevo año no es sólo una estrategia para iniciar 2025 con energía renovada, sino que es una forma de construir una cultura organizacional donde el desarrollo personal y profesional son valorados por igual”, declara Amira Bueno, directora de Recursos Humanos de la aseguradora en España.
“Es preciso centrarnos en pequeñas mejoras, pero consistentes, y no marcar metas inalcanzables que generan frustración. Este enfoque permite incluir a todos los empleados en su propio desarrollo y en la evolución de la compañía, asegurando que todos formamos parte del mismo objetivo común. De esta forma, los managers pueden inspirar a la plantilla a dar lo mejor de sí misma y asegurar que el éxito de la empresa sea el reflejo de un equipo plenamente comprometido y motivado”, agrega.
Con el fin de lograrlo, Cigna Healthcare destaca cinco estrategias que ayudarán a los managers a fomentar un entorno laboral propicio para alcanzar el éxito.
1. Crear ‘pactos de bienestar’ personalizados
“En un entorno laboral cada vez más competitivo y exigente, el bienestar de los empleados ha dejado de ser un aspecto secundario para convertirse en un actor clave en la retención y motivación del talento. En 2025, las empresas deben ir más allá de los beneficios tradicionales y ofrecer programas de bienestar adaptados a las necesidades individuales de cada empleado, reconociendo que cada persona enfrenta desafíos y prioridades únicas en su vida profesional y personal”, explica la compañía.
“Horarios flexibles, acceso a servicios de salud mental o iniciativas específicas para el cuidado físico son algunas de las opciones que refuerzan el sentido de pertenencia y la motivación del equipo y que ayudan a mejorar la percepción de la empresa como un lugar atractivo para crecer y desarrollarse”, añade.
2. Fomentar medidas DEI
Las medidas orientas a la diversidad, equidad e inclusión (DEI) se han colocado en lo más alto de las agendas de las empresas, como factores indispensables para asegurar la salud de la organización y para garantizar que se valoren las diferentes perspectivas y experiencias de todos los empleados.
“Esto implica no sólo promover la diversidad en el equipo, sino también asegurar que todos tengan las mismas oportunidades para crecer y aportar”, apunta la aseguradora.
Por ejemplo, señala que se puede aprovechar la diversidad generacional dentro de la empresa para crear oportunidades de aprendizaje mutuo; o crear sesiones formativas mensuales sobre diversidad e inclusión.
“De esta forma, se fomenta una cultura organizacional inclusiva y de colaboración, que impulsa el crecimiento personal y profesional, y el compromiso de todos los miembros del equipo”, apunta.
3. Priorizar la innovación y el pensamiento crítico
Cigna Healthcare defiende la importancia de la autonomía y la capacidad de tomar decisiones complejas para que los empleados se sientan empoderados para alcanzar el éxito. “Cuando los managers garantizan un espacio para la creatividad y el pensamiento estratégico los equipos no sólo desarrollan confianza en sí mismos y en su trabajo, sino que también contribuyen con soluciones innovadoras que responden a los retos del negocio”, especifica.
De este modo, resalta que este enfoque enriquece el desarrollo profesional de la plantilla y también agrega valor a la propia organización, ya que los trabajadores más comprometidos tienden a buscar soluciones innovadoras para los retos del negocio.
4. Impulsar una mentalidad de aprendizaje constante
En un entorno en constante cambio y evolución, la predisposición al aprendizaje continuo es indispensable para no quedarse atrás. Realizar capacitaciones largas puede complicar este proceso de reciclaje constante. Para asegurar su éxito, Cigna Healthcare recomienda poner en marcha programas prácticos, ágiles y efectivos como el microlearning, que permiten que los empleados adquieran nuevas habilidades de manera más rápida y eficiente, “ayudándoles a mantenerse actualizados y listos para los desafíos del futuro”, apostilla.
5. Promover la inteligencia emocional
La aseguradora insiste en que los managers deben fomentar el desarrollo de la inteligencia emocional de sus equipos, “ayudando a los empleados a reconocer y gestionar sus emociones de manera efectiva”.
“Esto incluye promover habilidades como la empatía, la autoconciencia y la regulación emocional, esenciales para el bienestar personal y la colaboración en equipo”, anota.
Además, explica que una plantilla emocionalmente inteligente se adapta mejor a los cambios y también establece relaciones laborales más saludables, “lo que aumenta la cohesión y la productividad”, concluye.