La marca de heladerías Bibì e Bibò da comienzo a su expansión en franquicia. «Nos definimos como la heladería de cucurucho inquieto, ya que nuestros helados adoptan diversos formatos que permiten su degustación de una forma divertida», explican desde la firma. «Hablamos de un local donde los helados se terminan de mantecar en las tiendas para ofrecer a los clientes un producto cremoso y recién hecho».
La enseña dispone actualmente de seis locales en Madrid y tres puntos de venta, uno de ellos en El Náutico de San Vicente, Pontevedra. El éxito que ha cosechado en poco tiempo ha propiciado que la compañía haya decidido dar un paso más y empezar la expansión en franquicia del negocio con la idea de abrir más locales en diferentes puntos de la geografía española.
Calidad e innovación en cadena
La marca tiene su foco en la calidad y la innovación. El producto se elabora de manera artesanal, directamente delante y a la vista del cliente, para poder saborearlo al momento y lograr la mayor cremosidad posible. En Bibì e Bibò se pueden encontrar más de 30 sabores y se presenta de muchas formas, «todas igualmente deliciosas»; desde los tradicionales conos o tarrinas, hasta panino, un brioche templado relleno de helado, en bandeja de helados o en torta de chocolate con nueces.
La idea del negocio surgió de dos hermanos emprendedores provenientes de una familia de tradición heladera, Sofía y Carlo Luppi. «El objetivo es reinventar el mundo del helado y llevar diferentes sabores de lo recién hecho a todos los paladares».
Para inversores o emprendedores con capacidad de gestión
Bibì e Bibò se implanta en locales desde 80 metros cuadrados, siempre en lugares de alto tránsito de personas y zonas de paseo. Respecto a las condiciones económicas, la inversión inicial parte de 131.000 euros, con un canon de entrada de 10.000 euros (incluido en la inversión), mientras que el royalty es de un 3% mensual sobre ventas y el canon de marketing un 2% sobre las ventas.
En cuanto al perfil de franquiciado, la central busca a inversores o emprendedores con capacidad de gestión, espíritu emprendedor, capacidad de trabajo, implicación en el negocio y que sigan siempre la filosofía de Bibì e Bibò. Indicar, por último, que no es necesario que posean conocimientos ni experiencia en el sector.
