Aunque radicada en Hungría, el origen más primigenio de Cookie Beacon se sitúa en Barcelona, cuando sus fundadores –Juan Daniel Gonçalves, Tanya Volkhina y Andreas Kanakis– crearon Alsur Café. Corría el año 2003 y esto marcó el inicio de un pequeño negocio de café y cookies que creció “hasta convertirse en el primer local de brunch de la ciudad”, recuerdan sus impulsores, quienes llegaron a inaugurar 10 locales diferentes bajo esta enseña.
En 2020 estos emprendedores decidieron emprender un nuevo rumbo y trasladarse a Budapest, con un proyecto completamente distinto en mente, lo que se tradujo en la apertura en 2022 de Cookie Beacon Brunch, “un lugar para disfrutar de cafecitos, chunky cookies y un brunch con un toque especial”, explican desde la central. “Hablamos de un concepto cuidadosamente diseñado. En este sentido, llevamos más de 20 años trabajando en identificar tendencias de mercado, con experiencia operativa en los segmentos de café, galletas y brunch”, subrayan los responsables del proyecto.
“Hemos detectado que tanto Europa Central como Europa del Este presentan un apetito enorme por modelos como el Cookie Beacon, especialmente dentro de nuestra demografía de enfoque”, continúan explicando estos emprendedores. “No es una coincidencia que en un espacio tan corto de tiempo nos hayamos convertido en el restaurante más visitado en toda Hungría, en nuestra tienda piloto en Budapest”, comenta Gonçalves.
A partir de aquí, la cadena se prepara para abrir sus puertas en Belgrado (Serbia), Bratislava (Eslovaquia), Praga (Chequia) y Bucarest (Rumania). El objetivo es que dos de cada tres aperturas de las 50 que tienen previstas hasta 2028 se hagan en Europa Central y del Este, en ciudades con población metropolitana de al menos medio millón de personas.