Cada vez dependemos más de la tecnología. Y en particular, del teléfono móvil. Sólo tienes que pensar en todas las cosas que haces con tu smartphone para darte cuenta de la importancia que tiene en tu día a día. Por eso, es posible que te entren sudores fríos sólo con imaginarte que se te rompe o te roban tu teléfono móvil.
Los inicios: experiencia y financiación
Sergio Balsa, que ya había tenido una experiencia emprendiendo y ofreciendo seguros para este tipo de productos a través de canales digitales, propuso a Juancho Cebral esa oportunidad de negocio, comenzando a pergeñar la idea de crear una compañía basada en la tecnología y enfocada principalmente en la cobertura de dispositivos electrónicos.
Ambos habían coincidido en Caixa Galicia, en el operador de bancaseguros de la entidad, por lo que conocían las particularidades de ese mercado. Y Cebral, que formaba parte de un grupo de inversores, compartió esta idea con sus socios, encontrando el apoyo económico necesario para desarrollar su plataforma tecnológica y lanzar los dos primeros productos: un seguro para móviles y una póliza multidispositivo.
Entrada en el canal retail
La venta era 100% digital, a través de la web de Insurama, realizando campañas de marketing a través de redes sociales, anuncios en Google, etc. Pero enseguida afrontó una nueva etapa, ampliando sus canales de venta. Y también logró captar más recursos financieros, recibiendo el apoyo inversor de Inveready.
“Abrimos un canal importante de venta más allá del digital. Aunque pensamos que el futuro está en lo digital y que la gente quiere comprar todo a través de internet, nos sigue gustando comprar por los canales tradicionales, yendo a la tienda”, comenta Sergio Balsa.
Así que se empezaron a suscribir acuerdos con retailers de productos tecnológicos. El primero fue con K-tuin, distribuidor oficial de Apple en España. El cliente que compraba algún dispositivo en estas tiendas podía salir con el mismo asegurado. “Al diversificar canales, el negocio se multiplicó casi por cinco”, afirma.
Salto internacional
La compañía empezó a plantearse la internacionalización en 2021. El primer destino fue Italia, a raíz de un acuerdo con una correduría de seguros del país transalpino surgido en una feria de telefonía móvil. “Era un mercado grande, en un país similar a España, con un bróker con muchísima antigüedad… pero no funcionó”, relata Juancho Cebral.
La empresa decidió replegarse, dejando Italia en standby. Y a finales de 2022 se abordó el mercado portugués, como extensión del nacional, con el back office en España y desplegando fuerza comercial en el país luso.
Casi a la par, Insurama se volcó en la expansión en Latinoamérica. “Hicimos varios análisis de mercado y decidimos ir a Latinoamérica, porque vimos que en el Norte de Europa, Reino Unido, Alemania y Francia había competidores fuertes. Nos iba a costar mucho penetrar en dichos mercados. Además, éramos pequeños y el idioma era una complejidad más”, explica.
México se convirtió en el principal objetivo, tanto por el volumen de mercado como por su proximidad geográfica con Estados Unidos. Allí firmó una alianza con GNP, principal aseguradora local, y suscribió acuerdos con MacStore y iShop, distribuidores de Apple, y con las cadenas de grandes almacenes Liverpool y Palacio de Hierro.
A lo largo de 2024, ha seguido avanzando en su expansión en el continente, comenzando a operar en Chile y Perú. Además, planea su desembarco en Colombia en el primer trimestre de 2025. También estudia extenderse a Centroamérica, con Panamá como centro de operaciones para toda la región: República Dominicana, Costa Rica, Ecuador… Asimismo, Cebral adelanta que la empresa se plantea la entrada en Brasil, Estados Unidos o Argentina, aunque no sería antes de finales de 2025.
Con el objetivo de liderar esta expansión internacional, la compañía ha ‘fichado’ como CEO a Stefano de Liguoro. El directivo procede de Zurich Seguros, donde ocupaba el puesto de director de Partnerships y Negocio Digital, por lo que está muy alineado con la actividad de Insurama.
No sólo tecnología
El punto fuerte de Insurama es el aseguramiento de dispositivos tecnológicos, tanto smartphones como cualquier otro aparato tecnológico. Sus clientes pueden contratar el seguro para un solo equipo o una póliza multidispositivo, que cubre cualquier equipo que el usuario pueda tener en su hogar –smartphone, televisor, ordenador, auriculares, smartwatch, tablet…–, siempre que tenga menos de 3 años de antigüedad y que se pueda acreditar su compra.
El usuario puede personalizar el seguro escogiendo las coberturas que desee: avería; extensión garantía o de reparaciones; protección de pantalla, accesorios, batería o cargador; garantía ante uso fraudulento de tarjetas en Wallet; ciberprotección, etc. También ofrece seguros para empresas, ofreciendo la cobertura de todos sus dispositivos.
Además, está ampliando su seguro a otros bienes físicos. “Si te compras un bolso de cierto nivel, un mueble o unas zapatillas y te apetece tenerlos asegurados, puedes hacerlo. Estamos en esa fase de expansión de esta línea. Tenemos varios acuerdos cerrados. El producto es muy similar, así que podemos hacerlo sin realizar grandes modificaciones ni cambios en la plataforma”, comenta Balsa.
Por ejemplo, contempla seguros para gafas, audífonos, muebles, zapatillas deportivas, ropa, bicicletas, patinetes eléctricos, instrumentos musicales, relojes, joyas, equipamiento deportivo (palas de paddle, palos de golf, tablas de surf, esquís…), etc.
Músculo financiero para crecer
La compañía ha buscado apoyo financiero para afrontar esta expansión internacional y la ampliación de su línea de productos. Insurama cerró dos rondas de financiación en 2024. En primavera accedió a una ronda Serie A en la que captó 8 millones de euros, liderada por la firma vasca de capital riesgo All Iron Ventures.
Asimismo, en el mes de septiembre anunció un acuerdo de financiación de 5,5 millones de euros por parte de BBVA Spark, la banca para empresas tecnológicas de dicha entidad. Desde su creación, la empresa ha recaudado más de 14,5 millones de euros en equity y cerca de 5,5 millones de euros en deuda.
¿Cómo funciona Insurama?
Insurama no es una aseguradora, sino que opera como bróker de seguros. Aunque se hace cargo de prácticamente todo lo relacionado con la fábrica y el back office de sus productos.
“Siempre tenemos como socio una compañía de seguros que se queda con el riesgo. Salvo eso, nosotros hacemos absolutamente todo lo demás: diseñamos los productos, hacemos la tarificación y nos encargamos de la comercialización, aunque sea a través de socios. Y cuando ocurre cualquier siniestro, lo gestionamos y nos ocupamos de la reparación. Para eso, tenemos una red de reparadores oficiales en todos los países, con cerca de 2.000 reparadores de todo tipo de marcas”, explica Balsa.
Su principal socio en la Península Ibérica es la aseguradora suiza Helvetia, aunque también cuenta con acuerdos puntuales con Axa Partners y Divina Seguros. Su socio en México es GNP, mientras que en Perú y Chile apuesta por acuerdos concretos con diferentes entidades.
Crecimiento con paso firme y seguro
Los ingresos de Insurama se han multiplicado por 10 en apenas 3 años. Sólo en el último ejercicio, ha duplicado su negocio. La compañía cuenta con aproximadamente 350.000 clientes. Alrededor de 1 de cada 4 pólizas son suscritas directamente por Insurama, mientras que el resto son contradas a través de sus partners.
Además, es un negocio muy rentable, con un ratio combinado del 75%. Este indicador es la diferencia entre las primas cobradas y la siniestralidad y gastos que origina el seguro. Para hacernos una idea, en salud y hogar se mueve en torno al 93% y 94%. Así pues, preveía cerrar 2024 con un beneficio bruto de 2 millones.
