En los últimos años, la alimentación ha evolucionado hacia un modelo más saludable y sostenible. Por eso, ahora más que nunca, el sector agroalimentario necesita recibir ideas frescas e innovadoras.
El organismo europeo EIT Food tiene entre sus objetivos buscar los proyectos más novedosos en este ámbito para ayudarlos a crecer y competir en el mercado global. Cada año busca a emprendedores con planes punteros para acogerlos en su incubadora Seedbed. La edición de 2024 ya ha comenzado, con la convocatoria de este programa a candidaturas procedentes de toda Europa.
El programa se desarrolla simultáneamente en diversos países, y se ejecuta a través de una red de las principales organizaciones que trabajan con startups en este ámbito: EIT Food, Universidad de Varsovia (Polonia), Universidad de Aarhus (Dinamarca), Swiss Food Research (Suiza), DIL (Alemania), Queens University Belfast (Irlanda del Norte) y Food 4 Sustainability (Portugal). En el Parque Tecnológico de Bizkaia se ubica (junto con Madrid) la sede de EIT Food en el sur de Europa y desde allí se coordinan las actividades de Seedbed.
El plazo para inscribirte termina el 26 de febrero de 2022. A partir de ahí, tras una selección previa, la sede de Bilbao acogerá a 8 emprendedores combinando formación online y presencial. Toda la información del programa Seedbed y sobre las solicitudes se puede obtener aquí.
Referencia en el sector agroalimentario
Solo el 3,4% de todas las startups de la Unión Europea están enfocadas en la industria alimentaria, y el 90% de estas empresas emergentes fracasan por falta de una necesidad de mercado para sus productos.
Este es el punto de partida de la incubadora Seedbed, un programa dirigido especialmente a personas emprendedoras que desarrollan productos o servicios en sus etapas iniciales, y que aspira a convertirse en la plataforma europea de referencia para transformar ideas innovadoras en empresas tecnológicas agroalimentarias sostenibles y escalables, y así, aumentar el número de negocios viables dedicados a este sector en Europa.
De esta forma, mediante la identificación y validación del potencial comercial de las innovaciones europeas más prometedoras se valoran las ideas que podrían tener un impacto sustancial en la resolución de los retos del sistema alimentario mundial.
Seis meses muy provechosos
En Seedbed, universidades y empresas innovadoras asociadas con EIT Food brindan su experiencia para madurar estas nuevas ideas de negocio. Durante seis meses, los emprendedores participan en un programa intensivo cuyo fin es convertir sus proyectos en empresas viables y con futuro.
El programa arrancará en julio en Bilbao, y se extenderá hasta diciembre. Durante estos meses los seleccionados recibirán formación empresarial sobre más de 12 temas, tendrán asesoramiento experto, y podrán conversar con más de un centenar de potenciales clientes.
A través de este programa, EIT Food ofrece a los emprendedores participar en un proceso que validará la necesidad del mercado de sus innovaciones tecnológicas de base científica. Además, da acceso exclusivo a un ecosistema de líderes mundiales del sector agroalimentario y se pueden obtener hasta 10.000 euros de financiación.
El programa está enfocado a tres grupos principales: emprendedores que quieren validar el potencial comercial de su innovación; emprendedores científicos (estudiantes, académicos o empleados) que quieren testar la salida comercial de una tecnología; o empresas de reciente creación (menos de un año).
Conectar con nuevos clientes
Dentro de los diferentes ‘hubs’ europeos, la sede española ha sido en los últimos años la que más interés ha suscitado entre las startups aspirantes a participar, debido al ecosistema empresarial y de emprendimiento que se ofrece. De hecho, algunos de los proyectos ganadores a nivel europeo han surgido de la sede de EIT Food de allí como Darween, Agriception o B-COS.
Han sido ya muchas las startups que se han beneficiado de este programa, y todas coinciden en que Seedbed ha sido pieza fundamental para dar vida a sus ideas. Así, como explica David Elizondo, confundador de PTICut, “Seedbed nos ayudó a ponernos en contacto con importantes clientes potenciales a los que no nos podríamos haber acercado de otra forma”. Además, Kārlis Ūdris, cofundador de Elogia, añade que “gracias al apoyo y asesoramiento recibido durante el programa, pudimos aprender a explicar mejor nuestra tecnología a los grupos de interés y cómo elevarla a un mayor nivel”.