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“Ser empresario es resistir sin dejar de avanzar”

Miguel López Abad, presidente de CROEM (Confederación Empresarial de la Región de Murcia) defiende, en esta entrevista, al empresario como motor de estabilidad y desarrollo.

21/05/2025  Redacción EmprendedoresAyudas
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Hace un año que Miguel López Abad asumió la presidencia de CROEM (Confederación Empresarial de la Región de Murcia) y su mensaje sigue siendo firme: defiende al empresario como motor de estabilidad y desarrollo, reclama mejor gestión y una visión más justa del tejido productivo.

En esta entrevista aborda temas como el agua, la fiscalidad o el impulso a los emprendedores, con un enfoque realista y comprometido, y reafirma su apuesta por el emprendimiento en la Región de Murcia.

Próximamente se cumple su primer año al frente de CROEM. ¿Qué ha aprendido del tejido empresarial desde dentro que no se ve desde fuera?

MIGUEL LÓPEZ ABAD: He confirmado algo que ya intuía: la empresa aguanta mucho, pero no aguanta todo. El compromiso del empresario con esta tierra es enorme, pero necesita apoyo, no obstáculos. Desde dentro, se percibe aún más claro que muchas decisiones políticas se toman sin tener en cuenta cómo afectan a quien genera empleo y riqueza.

«La Región de Murcia arrastra un déficit histórico en financiación autonómica, infraestructuras estratégicas y presencia en los espacios clave de decisión del Estado. Todo eso influye directamente en nuestra competitividad. No competimos en las mismas condiciones».

¿Qué está haciendo el empresario en su día a día que no está haciendo hoy la administración?

El empresario toma decisiones, asume riesgos, calcula los recursos y mide las consecuencias. La administración, por el contrario, se permite el lujo de no tener presupuestos y seguir funcionando. Esa es una diferencia abismal. Gestionar con seriedad implica realismo y responsabilidad, algo que deberíamos exigir a todos los niveles.

En este tiempo se ha visto obligado a levantar la voz para afirmar que el empresario no es moneda de cambio. ¿Qué motivó esa declaración y qué mensaje quiso enviar?

Cuando se usa al empresario con fines políticos o se legisla sin contar con quienes generan empleo, se desvirtúa el diálogo social. Quise dejar claro que ni las empresas ni sus representantes deben formar parte de ese juego. Tenemos legitimidad constitucional y merecemos respeto institucional. Si no se respeta nuestro papel, no participaremos en decisiones que comprometan nuestra labor.

¿Tiene la sensación de que la Región de Murcia sigue compitiendo con desventaja respecto a otras comunidades en financiación, visibilidad y apoyo institucional?

No es una percepción, es una realidad contrastable. La Región de Murcia arrastra un déficit histórico en financiación autonómica, infraestructuras estratégicas y presencia en los espacios clave de decisión del Estado. Todo eso influye directamente en nuestra competitividad. No competimos en las mismas condiciones.

«El empresario no solo arriesga su capital, también genera empleo, impulsa la innovación y sostiene buena parte del bienestar colectivo. Si no se respeta ese papel, se debilita el sistema entero».

El debate del agua vuelve a estar en el centro. ¿Qué se está haciendo mal y qué papel debería tener la solidaridad entre comunidades en un recurso que debería ser nacional?

El problema es que seguimos tratando el agua como un asunto territorial, cuando debería abordarse como un recurso estratégico de Estado. Se toman decisiones desde la coyuntura política, no desde la planificación técnica ni el interés general.

El trasvase Tajo-Segura es un ejemplo claro: se cuestiona por criterios políticos y no por su eficacia ni por la necesidad real de quienes lo reciben. Las consecuencias no afectan solo al campo. La industria, el turismo, la logística, las empresas tecnológicas o cualquier proyecto vinculado al desarrollo sostenible dependen de la seguridad hídrica.

No se puede hablar de atraer inversión y al mismo tiempo enviar un mensaje de incertidumbre en un recurso básico como el agua. ¿Quién va a querer invertir en una región si no tiene garantizado un recurso tan esencial para producir, crecer o simplemente operar con normalidad? La solidaridad entre comunidades debe traducirse en hechos, no en discursos.

Durante sus intervenciones insiste en recuperar el respeto social al empresario. ¿Por qué cree que se ha perdido parte de ese reconocimiento y cómo se puede reconstruir?

El empresario no solo arriesga su capital, también genera empleo, impulsa la innovación y sostiene buena parte del bienestar colectivo. Si no se respeta ese papel, se debilita el sistema entero.

Somos una pieza fundamental del desarrollo económico y social. Y eso debe traducirse en hechos, no en palabras. No se puede hablar de diálogo social si quienes representan a las empresas no están en la mesa. Si el empresario no participa, el diálogo no es completo.

La reducción de jornada laboral se plantea como un cambio estructural. ¿Se está legislando desde la realidad productiva del país o desde el relato político?

Se está legislando desde el relato, no desde los datos ni desde el terreno. El problema no es la idea en sí, sino cómo se pretende aplicar. Las empresas ya han reducido jornada a través de la negociación colectiva cuando ha sido posible.

En actividades donde los márgenes son muy ajustados, donde el trabajo es estacional o intensivo en mano de obra, esta decisión puede suponer directamente la inviabilidad del negocio. Además, no se ha explicado cómo se va a absorber ese tiempo de trabajo perdido. ¿Contratamos más? ¿Asumimos horas extra? ¿Aumentamos costes?

Esta medida añade más presión a un entorno ya complicado: inflación, incertidumbre, absentismo, costes energéticos y escasez de personal.

«Persiste una desconexión entre lo que se enseña y lo que las empresas necesitan. Para generar empleo de calidad, hay que formar para lo que el mercado demanda»

Uno de los problemas que más mencionan las empresas es la falta de perfiles cualificados. ¿Qué está fallando?

Está fallando el sistema. El principal problema no es solo la falta de perfiles, sino que se está incentivando la inactividad en lugar de fomentar el trabajo. Hay ayudas que desincentivan el esfuerzo y eso acaba alejando a muchas personas del mercado laboral.

Además, persiste una desconexión entre lo que se enseña y lo que las empresas necesitan. La Formación Profesional Dual es un buen ejemplo de cómo acercar la enseñanza al mundo real. Para generar empleo de calidad, hay que formar para lo que el mercado demanda e impulsar el compromiso con el trabajo.

El absentismo laboral ha crecido y está empezando a generar preocupación en muchas empresas. ¿Qué reflexión hace sobre este fenómeno y cómo se puede abordar con responsabilidad y equilibrio?

El absentismo es un problema complejo y real en las empresas. Cuando las cifras siguen aumentando, algo no está funcionando. Se necesita control, responsabilidad compartida y una cultura de compromiso que se incentive a todos los niveles.

Las empresas no pueden asumir indefinidamente los costes de ausencias que no siempre responden a causas justificadas, y esto es especialmente delicado en sectores con alta rotación o donde cada persona cuenta.

¿Qué temas importantes para el desarrollo empresarial siguen fuera del foco político y deberían estar en el centro del debate regional?

Simplificación administrativa, desbloqueo de suelo industrial, políticas activas de empleo y, sobre todo, estabilidad normativa. Necesitamos reglas claras y previsibles. Sin eso, es muy difícil planificar a medio plazo.

Pero también deben estar en el centro del debate el acceso a la energía a precios competitivos y la garantía de recursos hídricos como el agua, claves para la actividad empresarial. Sin seguridad en estos suministros básicos, es imposible hablar de desarrollo económico real.

¿Qué mensaje lanzaría a los jóvenes que hoy dudan entre emprender en su tierra o buscar oportunidades fuera?

Que emprender aquí merece la pena. La Región de Murcia tiene un marcado carácter empresarial, forjado con esfuerzo, iniciativa y visión de futuro. Somos una tierra exigente, que compite y crece dentro y fuera de nuestras fronteras. No es fácil, pero sí posible.

Redacción EmprendedoresHablamos de emprendimiento desde 1997. Esta experiencia nos permite conocer la evolución del ecosistema y las tendencias que se mueven por el mercado
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